Villacidro es un centro con una tradición agropastoral lejana, que por la belleza del paisaje también es popular para las vacaciones.
La información documental más antigua se remonta al siglo XIV, mientras que una tradición local dice que el nombre deriva de la coagulación de un asentamiento alrededor de un cedro legendario.
El trazado urbanístico, condicionado por la ubicación, única en Cerdeña, al borde de un abanico aluvial, se ha desarrollado en dos núcleos: uno más aguas abajo, construido en un terreno de suave pendiente y el núcleo más característico aguas arriba está formado por lotes compactos de casas mayoritariamente de piedra, que parten de la plaza parroquial dedicada a Santa Bárbara de cuya construcción original gótico-aragonesa del siglo XVI, se conservan el campanario y la capilla mayor con bóveda de estrella; modificado durante el siglo. XVII, contiene algunos muebles, mobiliario sagrado y estatuas del siglo XVI-XVIII.